El miércoles 21 de febrero, María Fernanda Oviedo rindió las prácticas y se recibió de profesora en Lengua y Literatura. Lo novedoso es que se convirtió en la primera egresada de “Potenciar la graduación”.
-¿Qué sentis de ser la primera de tu carrera en recibirte con este programa?
-Siento que por fin soy la primera en algo porque siempre llego al último en todo. Me gusta porque sirve como motivación para otras personas que han dejado por diversos motivos la carrera.
Fernanda empezó el profesorado en 2002 y abandonó cuando solo le quedaban tres materias por rendir. Hoy, con 34 años, recibe el tan ansiado título. “Es como si hubiese hecho cuatro carreras porque me recibí después de 16 años”, decía Oviedo mientras espera pasar a rendir. Los pasillos del Pabellón 3 estaban vacíos. “ No vino nadie a esperarme porque no quería que me tiren huevos.Ya estoy vieja para eso. Mi marido y mi hijito me están esperando en la Planta Piloto”, dice entre risas. Fernanda sabe que su familia está orgullosa por su logro. “Era una deuda pendiente que tenía”, afirma.
-¿Qué pensás del proyecto “Potenciar la graduación”?
– Me parece una propuesta que apunta a la inclusión porque la universidad pública a veces se cierra a contextos óptimos. Solo pueden cursar los chicos que tienen posibilidades económicas, horarias, parecidas al secundario. Pero en nuestra carrera no hay una franja horaria que nos permita trabajar y estudiar al mismo tiempo, se hace muy difícil. Más aún cuando te convertis en madre.
-¿Por qué te inscribiste en este programa que brinda la UNRC?
-Me anoté a fines del 2016 porque dejé mi carrera. Por decisiones personales me aboque a otras actividades, me fuí de Río Cuarto y se me complicaba cursar. Después formé una familia y a mi carrera la tenía como una materia pendiente que siempre estaba latente pero no tomaba la decisión de terminar.
La flamante egresada sostiene que los docentes, al enterarse de su retorno al estudio, la apoyaron e incentivaron. “Por primera vez siento que la universidad me recibe”, dice.
Fernanda se refirió también a la situación de la educación en la actualidad y al bajo porcentaje de egresados de Lengua y Literatura . “Los profesorados están golpeados por la situación laboral. La docencia está precarizadas y las investigaciones están desfinanciada. Sin embargo, a partir de nuestra carrera buscamos encontrar nuevos sentidos en esta sociedad”.
La nueva graduada siente que al recibirse pudo cumplir una de las metas de su vida. “No sé qué lugar de mi vida ocupará el ejercicio de la profesión pero me permitió cerrar un ciclo”, afirma.
Por Gabriela Colombino
